miércoles, 26 de junio de 2013

Reflexión Bloque I

Desde que somos pequeños, hemos tratados la literatura de manera global, pero nunca nos hemos parado a lo que significa esta palabra realmente. No podemos definir la literatura con una palabra, ya que este concepto tiene muchos significados.

La definición teórica de la palabra literatura, que hemos dado en clase, es que para escribir literatura necesitas tener la intención de escribir algo, aunque no sea real. En primaria, lo que se trabaja principalmente es la lectura, ya que uno de los objetivos principales de la Educación Primaria es crear interés y gusto por la lectura. El niño no aprende la teoría de los conceptos literarios, ni de los géneros, sin embargo, constantemente, el niño está en contacto con figuras literarias y distintos géneros, a la hora de la lectura.

Cuando era pequeña, mi madre me obligaba a leer, al menos una hora, antes de bajar a la calle. Creo que el hecho de que mi madre me obligase, hacia que para mi, la lectura no fuera divertida. Siempre he pensado que un cacho de papel no te podía llegar emocionar y transmitir sentimientos. Poco a poco, me he ido dando cuenta de que estaba muy equivocada con la lectura, hoy en día puedo decir que me gusta leer. Hasta que no encuentras un libro que te engancha de verdad, no te das cuenta de lo que te puede transmitir un libro. Para mi gusto, prefiero las historias de amor, ya que, aunque sean ficticias, me gusta imaginar que es la realidad.

Cuando vi las asignaturas que íbamos a impartir en este curso, leer literatura me echó para atrás, ya que la idea que tenía de esta asignatura era teoría, teoría y más teoría. A medida que iban pasando las clases, tener clase de literatura me iba gustando más, ya que los temas tratados y los conceptos que íbamos adquiriendo venían por sí solos.  .

La mayoría de los libros que nos han mandado leer en las etapas de la ESO y Bachillerato, han perjudicado, de manera evidente, la motivación a la lectura. Alguno de los libros que me leí en la ESO, que me gustaron fueron: "El último crimen de Pompeya" de Emilia Calderón, "diario de un campo de barro" de Ricardo Gómez, "Marina" y "El palacio de la medianoche" de Carlos Ruiz Zafón. Cuando nos mandaban leer un libro de este tipo, sabíamos que el libro venía acompañado de un examen, de actividades o de cualquier trabajo aburrido. Creo que eso nos hizo que el gusto por la lectura desapareciese de nosotros de un día para otro.
Por mi experiencia en relación a la lectura, creo que es fundamental conocer a tus alumnos antes de mandar los libros de lectura del curso.

Cierto es que puedes no llegar a todos tus alumnos con la elección de un libro, pero generalmente, cuando expones una lectura, en según cierta edad, suelen compartir gusto u opiniones y si un libro es llamativo es probable que capte su atención. Para ello, se debe analizar un libro en sus dos aspectos importantes. Lo primero, es ver si se adecua a la edad. Si está enfocado acorde a la edad del lector. Si es antiguo o por lo contrario, si está a la moda. Todo ello, como he podido aprender, va ligado a la motivación. No basta con leer la edad que pone en los libros, hay que averiguarlo. Hay que conocer el libro que vas a mandar leer a tus alumnos, pues no es justo que ellos se frustren leyendo un libro que no les motiva en absoluto, existiendo otros en mil librerías que podrían fomentar su gusto por la lectura desde tan temprana edad.

Para mandar leer un libro a los niños, debemos responder a dos preguntas básicas: ¿Es adecuado para ellos?, ¿tiene  los aspectos necesarios para que los niños se motiven? Necesitamos saber las preferencias de los alumnos, ya que para los niños lo más importante a la hora de la lectura son las ilustraciones, los personajes, el lenguaje y el tema. Todos estos aspectos deben ser creativos e interesantes que captará la atención de los niños.

En este bloque, he aprendido que es muy importante seleccionar un libro, analizarlo en todos sus contratiempos, pues va a ser su lectura su ejemplo a seguir. Si machacamos a los niños año tras año con libros que no causan motivación en ellos, les estamos quitando la magia de leer, de vagar por el mundo de las palabras, de imaginar, de soñar.

Como futuros docentes, tenemos que tener un amplio conocimiento de literatura infantil, para mandar a nuestros alumnos un libro determinado. Pero antes, debemos conocer en profundidad a nuestros alumnos, para así conocer sus gustos, y a partir de esto, mandarles un libro u otro.


Para concluir, debo mencionar los links que he encontrado de este bloque, que me he dado cuento la cantidad de librerías y de bibliotecas que hay. La literatura infantil pasa desapercibida ante nuestros ojos, pero al realizar la búsqueda de librerías, bibliotecas, entre otros, he observado la amplia variedad que hay de literatura infantil. Nos ha venido muy bien esta búsqueda para adquirir nuevas ideas de literatura infantil para nuestro futuro profesional como maestro. 

1 comentario: